Cuánto dolor y oscuridad se puede sentir ante la pérdida de una parte de tu cuerpo, así sea el más pequeño de tus dedos. Estas ahí, pareciera que no hay salida. ¿Culpa? ¿Enojo? ¿Miedo? Son emociones que se mezclan y podrían llevarte a un torbellino de sufrimiento, que no cesará. Al menos, eso te parece, pero pasará, aprende Cómo superar una amputación
Cómo superar una amputación
La filosofía budista, nos abre los ojos y nos dice: El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional. Analiza toda la verdad que encierra esta frase. Ese dolor desgarrador ante la pérdida de una parte de ti, todas esas emociones lacerantes, no las puedes evitar. Es natural que suceda, te debes permitir sentir para luego, poderlo liberar.
Sufres cuando te anclas al dolor que sentiste una vez y lo sigues sintiendo, así pasen años y años. Aprende a liberarte para que cese tu sufrimiento, y puedas continuar.
Llorar para sanar
Cuando vivimos un desequilibrio emocional, la naturaleza actúa con sabiduría dentro de tu ser. Naturalmente sientes enormes ganas de llorar, gemir y suspirar. Tu cuerpo así elimina la gran cantidad de toxinas que las emociones que atraviesas han generado. De manera natural, nuestro cuerpo sabe cómo sanarse. Sabe Cómo superar una amputación.
Tal vez piensas que llorar es para débiles, o que ya eres muy grande para llorar. Es muy probable que decidas mostrarte ante los demás como alguien muy fuerte y contienes esas lágrimas. Entonces debes saber, que las lágrimas guardadas, contenidas, te pesarán tanto, que te anclarán al sufrimiento.
Concede a tu ser el permiso de llorar. Llora, llora, llora; quizá pienses que ya fue suficiente, pero luego sentirás nuevamente el deseo de llorar, vuelve a hacerlo. Grita, golpea almohadas, gime, que no te quede ni una sola lágrima. Tienes que liberar todo, esa es la forma natural para sanar, no lo reprimas. Reconoce que vives un proceso difícil, pues así podrás liberar el sufrimiento.
El Miedo
Según tu situación y temperamento, sentirás miedo o enojo, o bien, pasar de una a otra emoción. Tal vez sientas miedo a ser dependiente, a darte cuenta, que habrá muchas cosas que ya no podrás hacer nuevamente. Sentirás culpa, o culparás a alguien; esto te enojará, sentirás rabia y nuevamente miedo, miedo a que el problema avance.
Desearás aferrarte a la idea de que es un sueño, y que pronto despertarás. Incluso cuando apenas te dan la noticia de que no hay opción y la cirugía es necesaria. Comenzarás a negar lo que ocurre. Dirás que el médico no sabe o se traspapelaron tus estudios, y al que tienen que amputar es a otro. Buscarás otras opiniones, remedios milagrosos, prometerás y harás negociaciones con el todopoderoso si evita tu amputación. Todo esto puede ocurrir hasta que hagas conciencia de tu inevitable paso por el quirófano, si quieres preservar la vida. Y luego el proceso de Cómo superar una amputación te hará sentir debatido, pero saldrás adelante.
El miedo te hará sentir vulnerable, indefenso y hará que te reprimas, que te paralices. El enojo por el contrario, te hará sentir fuerte, te dará cierto poder y control. Construyes un muro a tu alrededor al saber que estás destrozado por dentro, pero eso sólo te causará más problemas.
Tu agrio carácter hará que los demás se alejen de ti. Si te vuelves insoportable, además de la pérdida de tu miembro, perderás también a tu esposo (a), hijos y amigos.
¿Qué puedes hacer?
Ámate y sé comprensivo contigo mismo. Acepta lo que sientes, perdona a todos y a ti mismo. Rechaza los resentimientos por lo que hiciste, lo que no hiciste, el pasado, la sociedad, por todo o por nada. ¿No sabes cómo hacerlo? Sólo expresa en tu mente o con palabras, que decides perdonar, para ser libre. Hazlo muchas veces, todos los días. Poco a poco te sentirás más liviano y en paz. Y llora, llora, llora, todo lo que tu cuerpo te pida. Casi sin que te des cuenta terminará este proceso de Cómo superar una amputación.
Muchas, muchísimas veces al día, repite para ti mismo, todo el tiempo, y si gustas agrégale una tonada y canturrea:
Yo me amo
Soy perfecto (a)
Cada cosa sucede para mi más alto bien
Todo está bien!
Sé que no te sentirás con ánimo; está bien, siente tu dolor y llora otra vez. Cuando te hayas cansado de llorar, repite la frase. Si te enoja la frase, está bien, invoca la ley del perdón. Perdona nuevamente a todos y a todo y libera. Verás que poco a poco comenzarás a sentirte mejor.
Descansa, pero cada que puedas, repite nuevamente la frase. Ya lo dijo el filósofo inglés George Henry Lewes, la única cura, para el dolor es la acción. Toma el control, realiza acciones que te permitan pasar este proceso de la mejor manera y lo más pronto posible. No se trata de fingir y simular que todo está bien y seguir como si nada. Si lo haces te anclará, y si te acostumbras a cargar ese peso, no podrás avanzar. Avanza, no te permitas quedarte en un punto fijo ni trates de aparentar que ya todo está bien.
El INR (Instituto Nacional de Rehabilitación) de la Secretaría de Salud, está facultado para apoyar a personas que están viviendo un proceso de perdida de un miembro, acércate, a provecha éste y todos los recursos que se te crucen, para que tu travesía te resulte más leve.
Libera el sufrimiento, solo así sabrás Cómo superar una amputación
Tras la amputación, quizá sientas por breves periodos, dolor, hormigueo, frío etc. En general sentirás que ahí sigue tu dedo, tu pie, o tu pierna. Esto representa un desafío más, porque las primeras veces, te ilusionarás y voltearás en busca de lo perdido. Sentirás el enorme deseo de confirmar que todo había sido una pesadilla. Confirmarás entonces que realmente ya no está, que se ha ido. Volverá el enojo ¿De qué sirvió?, si aún siento dolor.
Está bien, permítete sentir ese dolor, llora, ya pasará. Lo estás haciendo bien, recuerda siempre que eres más valiente de lo que crees. Date cuenta que eres más fuerte de lo que pareces, que en verdad eres perfecto y que no estás solo.
Habla con alguien de toda tu confianza, cuéntale todas tus emociones, pídele que solamente escuche y no haga juicios. Si prefieres escribe, lo importante es que lo liberes. Te sentirás mejor tal vez si escribes lo que sientes o tus comentarios aquí abajo. Escribir no solo te ayudará a ti, también le servirá a otras personas que están viviendo lo mismo que tú. Darte cuenta que hay más personas pasando por lo mismo, te aligerará la carga, porque puedes compartir con los demás.
Si lo sabes ver, este tipo de procesos siempre te deja algo positivo. Una vez que llega la calma y la aceptación, habrá un aprendizaje. Te sentirás más compasivo ante el dolor ajeno, valorarás todo lo que tienes, serás una persona más responsable y madura. Crecerás.
Cambia para vivir
Al intentar comprender lo que estás pasando, necesitas reconocer qué hiciste o qué no hiciste para llegar a este punto. ¿Por qué? Tal vez pensarás: “Mejor ya lo olvido” o “lo hecho, hecho está”. El problema es que si tienes Diabetes, es importante ver lo que nos dicen las estadísticas. Nos dicen que tras un dedo amputado, se incrementan las posibilidades de que se ampute el pie o la pierna. Tras esta amputación ¿Qué sigue? La pérdida del otro pie, y de la vida, atravesando por un viacrucis el resto de tus días.
Es urgente que realices cambios en tu estilo de vida, si quieres detener este fatal desencadenamiento. Cuidar tus niveles de azúcar es imprescindible y eso lo logras atendiendo tu dieta principalmente, además de actividad física. Pero no olvides nunca la importancia de tener pensamientos positivos, de paz y armonía.
Tú puedes ¡No desistas!
Si tomaste sesiones de cámara hiperbárica, con esperanza de evitar una amputación, es comprensible, que si perdiste tu miembro, no quieras saber nada de la cámara hiperbárica. Seguramente pensarás que no sirvió de nada y te sentirás molesto. Considera nuevamente que es parte de tu proceso, está bien, siéntelo. Pero piensa que seguramente tomaste las sesiones cuando ya era tarde. Debes ver la amputación como necesaria para detener un mal mayor.
La cámara hiperbárica, siempre te será de gran ayuda tras una amputación. Si te quedaron sesiones, aprovéchalas, es lo mejor que puedes hacer. Ya que, los beneficios de la cámara Hiperbárica te permitirán vivir más ligeramente este periodo y sabrás cómo superar una amputación, porque…
- Acelera la cicatrización
- Combate la infección
- Desinflama
- Regula los niveles de azúcar, para que el problema no continúe
- Te disminuirá el estrés y descansarás mejor
Además compartir lo que sientes con personas que hoy viven la misma situación, te permitirá pasarlo de un modo más ligero. No es un proceso fácil. Pero será inmensamente más difícil si te anclas al dolor, y no lo superas. ¡Sé que puedes, no desistas! Incluso en esta etapa de dolor y proceso de Cómo superar una amputación no lo olvides…
Por tu salud… date un respiro!!!
Photo credit: <a href=»http://foter.com/re/bc8af8″>Foter.com</a>
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Necesito ayuda tras doble amputacion infracondilea de mi madre con 70 años , apoyo psicologico
Buen día Lola, lamentamos la noticia de tu mami y sabemos que es algo fuerte de enfrentar. Nadie quiere una amputación y es un duelo de tu mamá que va a necesitar la asistencia de un profesional. Bien mencionas apoyo psicológico (psiquiátrico de ser necesario) o de un tanatologo mientras superan la pérdida de los miembros de tu mami. Nosotros no contamos con una persona específica para ello, pero en cualquiera de las tres especialidades mencionadas podrías encontrar la ayuda que les hace falta para poder manejar dicho duelo, tanto a paciente y familiares. Esperamos que pronto se encuentre mejor tu mamá y el apoyo con cámara hiperbárica puede acelerar la desinflamación, reducir el tiempo de cicatrización, minimizar el riesgo de infección en las heridas y brindarle un fortalecimiento físico a tu mami para una rápida recuperación de su cirugía. En lo que podamos orientarte lo haremos con gusto.